Desgraciadamente es la palabra favorita de muchos trabajadores de Telefónica, es el mayor anhelo de algunos, esperan ansiosos cuándo les llegará su turno. Nos hemos acostumbrado a salir con 52,53 años con un buen despido, voluntariamente y sin discriminación. De todas formas la experiencia nos dice que son puestos de trabajo que se pierden. Ninguna alegría a largo plazo.
Pero los EREs en British Telecom, Vodafone, Kpn, Coca-Cola, Panrico, Puleva, Roca…anuncian una nueva era. Quizás debamos estar en guardia, no desear el despido y aprender a estar unidos y luchar, porque ahí fuera no suena muy bien la palabra ERE. ¿Y aquí, como sonará en el futuro?
¡Trabajadores del mundo uníos, porque de no hacerlo no van a parar de machacarnos!