La inflación, la subida de los precios, supone que perdamos poder adquisitivo en los salarios. Sin embargo aumentan las ventas y los beneficios de la patronal, porque la diferencia entre los salarios y lo que producimos son sus ganancias. La inflación es un suplemento de beneficios empresariales a costa de los salarios de la clase trabajadora. De ahí que los mismos estudios económicos de CCOO indican que los beneficios empresariales son los responsables del aumento de los precios, que suponen una bajada de los salarios.
El preacuerdo en la subida salarial en el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva supone una pérdida de poder adquisitivo para los asalariados. El aumento pactado por UGT, CC OO y CEOE sería del 4% en 2023, del 3% en 2024 y de otro 3% en 2025. Esto supone subir los salarios un 10% en 3 años. Esta pérdida de los salarios supone sólo este año un 5% de media pues la inflación cerró 2022 en el 8,4%. Esto significa además que la subida se podrá pactar en los convenios pero con el agravante que todo lo que se ha perdido en 2022 no se recuperará.
Sin embargo los beneficios empresariales han subido en 2022 un 42% y esto en todos los sectores. Por poner el ejemplo del sector aeronáutico, Airbus ganó en 2022, 4.247 millones; a esto hay que añadirle que las subcontratas han engordado también en beneficios. Realizan el mismo trabajo para Airbus y se cobra muchísimo menos. Además desde el último convenio se ha perdido un 18% de nuestro salario por la inflación. Los salarios de todos los convenios hay que subirlos el 8,4,% como mínimo.
Que no nos engañen: lo que perdemos en nuestros salarios por la subida de precios, lo gana la patronal responsable de la inflación. No tenemos otra solución que la movilización obrera para exigir y obligar a la patronal que pague. Tenemos que preparar las luchas todos juntos para luchar en los convenios.
¡Por un salario digno indexado al IPC real!