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El 15M del Cerro-Amate

Un 15 de mayo de 2011 miles de personas acampan en la Puerta del Sol en Madrid. Denunciaban la inacción y complicidad de los poderes políticos y económicos, señalándoles como culpables y causantes de la corrupción y la falta de una democracia real. Poco después se extiende a toda España.
La crisis económica de 2008 lleva 3 años golpeando duro, y el movimiento huye de los partidos políticos no sólo tradicionales, fueran de izquierdas moderada o revolucionaria, prohíben las banderas y signos partidarios de izquierda o republicanos, es antisindical, metiendo en un mismo saco a CCOO y UGT y los otros sindicatos más combativos. Para una parte importante de los ocupantes de las plazas son los políticos y el régimen salido de la transición los culpables, junto a la banca. La clase trabajadora está ausente y decimos ausente no porque no hubiera trabajadores presentes, que estaban, sino porque la falta de politización, de conciencia de clase, permitía una visión interclasista, ciudadana, de los problemas.
Pero en la medida que las luchas obreras se desarrollan, hay militantes que apoyan e intentan extenderlas y van tomando protagonismo reivindicaciones como la prohibición de los despidos, el reparto del trabajo sin bajar los salarios, la investigación pública de la contabilidad de las empresas, el control obrero o la expropiación de la banca. Es decir, las luchas obreras permitieron que en ciertos barrios obreros con cierta tradición militante, los militantes que allí confluyeron pudieran elaborar planes de lucha y reivindicaciones obreras que iban directamente contra el capitalismo y permitían la lucha, un intento de generalización o por lo menos la popularización de consignas de transición hacia el fin del derrocamiento del sistema económico capitalista. Este es por ejemplo la estrategia llevada en el 15M del Cerro- Amate, por los integrantes de la Comisión Laboral y donde había militantes de Voz Obrera. La Coordinadora de Trabajadores en Lucha, por ejemplo, es ejemplo de ello. En el 15M del Cerro se analizó el origen de la crisis económica capitalista, se estudió el origen y desarrollo del movimiento obrero y sus luchas en seminarios donde se volvió a estudiar a Marx y su análisis, así como argumentar la necesidad del socialismo.

EL CERRO AMATE EN EL MOVIMIENTO 15M

En junio de 2011 el movimiento se traslada a los barrios y pueblos. En los barrios obreros y populares, formados por familias castigadas por el paro, los bajos salarios y los empleos precarios, el movimiento 15M proporcionó un altavoz a sus demandas. Se hizo con asambleas populares abiertas que se celebran en plazas o parques y estructuradas en diversas comisiones de trabajo (legal, comunicación, acción, actividades, barrios, estatal e internacional, información, infraestructuras). A su vez organizadas en grupos de trabajo: economía, medio ambiente, trabajo social, feminismos… Multitud de temas, que reflejaba la variada composición de estas asambleas, que aglutinaba a diversos colectivos ciudadanos.
En los barrios obreros y aquellos con tradición de lucha y donde había militantes con un programa de lucha obrera, se produjo una respuesta distinta a lo que fue en general el 15M como movimiento interclasista de ciudadanos, que se organizó en el centro de la ciudad, en Las Setas –Plaza de la Encarnación- todos los viernes a las 20,00 horas, con una representación de los portavoces de las distintas asambleas de barrio. La movilización popular prendió en muchos de estos barrios y se expresó en forma de concentraciones y en las manifestaciones posteriores, visibilizando las condiciones de vida y de trabajo precarias de mucha gente.
Hubo, como decimos, muchos barrios que participaron en las asambleas del movimiento. En aquellos donde la clase trabajadora estaba más presente y sobre todo por tradición de lucha, se aprovechó el altavoz que proporcionaron las asambleas en su zona. El Cerro Amate fue una de esas zonas que enseguida acogió y aprovechó la llegada del movimiento 15M.
El distrito Cerro Amate lo componen las barriadas de la zona sur-este de Sevilla. Es un distrito de carácter obrero y popular de 90.000 habitantes aproximadamente. Son barrios con un alto nivel de desempleo y pobreza, problemas agravados por la pasividad de las instituciones. Cada año y según los últimos datos del INE, el Polígono Sur figura como el barrio con menor renta neta media anual por habitante de toda España, seguido del barrio Los Pajaritos, no por casualidad estos se cuentan como los barrios más pobres de Europa
Un grupo de personas del barrio deciden convocar una primera asamblea para dar forma a la que fue llamada Asamblea 15M Cerro-Amate. El Centro de Personas Adultas Manolo Reyes, en la barriada Las Águilas, ofreció su espacio y se fija el 1 de junio su convocatoria. Se preparan panfletos y se llevan a cabo repartos en los distintos barrios del distrito. A esa primera asamblea asistieron unas 70 personas.
Desde el principio, esta asamblea se nutrió de gente combativa, llevando reivindicaciones obreras y proponiendo acciones para que la gente en los barrios se organizara y luchara.
En esa primera asamblea se decidió su nombre, la dirección de correo, la programación de sus convocatorias, se decide también celebrar cada asamblea en un lugar distinto para facilitar la asistencia de la gente de distintas zonas. La asamblea también decide la preparación de un manifiesto que refleje sus objetivos.
Se decide la formación de distintas comisiones de trabajo. Mediante grupos de voluntarios se organiza la comisión laboral, la de vivienda, la de comunicación, tesorería. Estas comisiones se crean para repartirse funciones, agilizando los preparativos en las movilizaciones y de cara a las próximas asambleas.
Por ejemplo, la comisión de vivienda se ocupó de informar y ayudar a las familias que buscaban una vivienda. En muchos casos se trataba de orientar los pasos o ayudar en los trámites de ayuda municipal de vivienda. Otro paso fue la creación de los Puntos de información de Vivienda y Encuentro (PIVE), para atender y tratar de asesorar a las personas con problemas con la vivienda (hipotecas, alquileres y sin vivienda), cosa que en general se hizo en casi todo el movimeinto 15M. También se ocupaba de los llamamientos contra los desahucios, donde un número indeterminado de personas, casi siempre numeroso en estos momentos, se concentraba a la entrada de la vivienda en proceso de desahucio tratando de impedir que se llevase a cabo y muchas veces convocando a los medios para denunciar estos ataques a la población.
La comisión de tesorería se encarga de llevar el control del dinero que llega a la asamblea, ya sea en forma de aportaciones voluntarias, de recaudaciones para los viajes en bus durante las manifestaciones o marchas, etc. Ese dinero sirve para sufragar los gastos de fotocopias y cartelería, entre otros. Esta comisión informa en uno de los puntos del orden del día, del monto en tesorería, de los gastos e ingresos.
El grupo de trabajo en la comisión laboral se ocupaba sobre todo de presentar iniciativas a la asamblea, con el objetivo de llamar a la movilización y para llevar a cabo acciones de protesta, concentraciones, manifestaciones, apoyándose para ello en la comisión de comunicación para redactar y posteriormente repartir cartelería y panfletos por los barrios. Mediante estas acciones de protesta se denuncia la situación de desempleo que sufren las gentes, los despidos, la falta de oportunidades laborales sobre todo en los jóvenes, se denuncia exhaustivamente a los bancos como corresponsables de la crisis. También se trata de crear conciencia llamando a la población a actuar y manifestarse contra esta situación, que, de manera pasiva, además, toleran las instituciones.
También, en esta comisión, se apoyaba a las personas que venían con algún problema y necesitaban orientación. En ese sentido se trataba sobre todo de facilitarle cauces de ayuda, como ponerle en contacto con servicios asistenciales o con algún tipo de asesoría gratuita.
En la asamblea del Cerro, la comisión laboral organizó movilizaciones, concentraciones, además de algunas manifestaciones. Bajo el lema “Pan Trabajo y Vivienda” se denunciaba la situación de paro y la falta de expectativas en los barrios.

15 DE OCTUBRE DE 2011 – MANIFESTACIÓN CONTRA EL PARO Y LOS DESPIDOS

El sábado, 15 de octubre de 2011, hay una manifestación contra el paro y los despidos. Sale a las 17:00 horas desde la Consejería de Empleo en Avda. de Hytasa. Esta manifestación ha sido convocada por las asambleas: Cerro-Amate, Centro, San Pablo y Santa Justa, Jacaranda, Zona Sur y San Jerónimo y la Intercomisión laboral.
Otra de las acciones que promovió la comisión laboral fue un encierro de trabajadores en las oficinas del SAE, para protestar y reclamar soluciones a nuestros políticos ante las altas tasas de paro y la precariedad laboral que estos barrios vienen sufriendo. Se trata del paro y de los despidos que son el principal problema de la población y sobre el que gravitan todos los demás, mucha gente pierde su vivienda a partir de la pérdida de ingresos por quedarse sin trabajo.

EL ENCIERRO EN EL SAE EN MARZO DE 2012

Un grupo de trabajadores deciden encerrarse en una oficina del Servicio Andaluz de Empleo en marzo de 2012 en protesta por el paro y los despidos.
En noviembre de 2011 en Sevilla se producen casi a diario manifestaciones y concentraciones. Hay un ERE en marcha en una subcontrata de comunicaciones, SERTEL. Los estudiantes de la universidad de Sevilla convocan una huelga para el día 17. La Inter comisión laboral del 15M apoya a los trabajadores de la empresa de recreativos COFISA, que están en huelga por incumplimiento de convenio y despidos. Manifestación de trabajadores de Mercasevilla el día 14 de noviembre ante el anuncio de su venta poniendo en peligro las prejubilaciones.
El mismo día 17 la asamblea de Torreblanca llama a apoyar una concentración frente a una oficina de Cajasol contra un desahucio. Micaela Navarro (Consejera de Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía) había anunciado el cierre de la residencia de Montequinto. El 16 de noviembre se organizó una manifestación contra ese cierre, a la que habrían asistido unas 500 personas.
Todo esto ocurre entre el 12 y el 18 de noviembre, que coincide con la semana de lucha organizada por el 15M. Días antes, el 4 de noviembre tuvo lugar una reunión de la comisión laboral del 15M. A la misma asistieron CGT, Corriente Roja, dos miembros de la asamblea del Cerro-Amate, algunos miembros de Voz Obrera, tres de la Inter comisión Laboral y dos de Izquierda Anticapitalista. En dicha reunión se propuso una ocupación simbólica de un banco, edificio público u otro sitio. Así los diferentes colectivos trasladarían esta propuesta a sus organizaciones respectivas para ver si se puede movilizar suficiente gente.
En el Cerro-Amate, la comisión laboral presenta a la asamblea una propuesta para llevar a cabo concentraciones de protesta contra el paro y los despidos, en la sede del SAE del distrito. Se emite el siguiente comunicado de prensa y cartelería.
El paro es uno de los mayores problemas que sufren estos barrios. Entre los vecinos y vecinas que acuden cada fin de semana a las asambleas, se hace mención a la falta de oportunidades laborales, a la inacción de las instituciones, a la libertad que tienen los empresarios para imponer precarias condiciones de trabajo y despedir.
Los jóvenes se enfrentan a un futuro incierto, tras los estudios se presenta la falta de oportunidades laborales. También, la población adulta que ha sido despedida de sus empleos tiene muchos problemas. Las empresas, para ahorrarse costes, suelen despedir a los trabajadores más antiguos y en su lugar contratar en precario a los jóvenes, a éstos su falta de experiencia y urgencia por trabajar suelen aceptar peores condiciones laborales. Estas cuestiones están muy presentes en las asambleas, la gente habla de ello en sus intervenciones, lo que lo coloca en el primer problema para la población.
En una de estas asambleas se oyen propuestas para reivindicar el empleo y presionar a las autoridades laborales. Una de estas propuestas consiste en ocupar las oficinas del SAE (antiguo INEM), en la calle San Juan de la Cruz. A partir de esa propuesta la comisión laboral comienza a trabajar, y se le da forma mediante varias sesiones de trabajo.
En las sesiones de trabajo de esa comisión se discute la estrategia de la ocupación, se ofrecen voluntarios, compañeros y vecinos que están en el paro. Se discuten los pros y los contras de un encierro que puede ser que se prolongue durante uno o dos meses. Tres serán los compañeros que se encierren en las oficinas de empleo, aunque uno de ellos la abandonaría más tarde por problemas de salud. En principio, la duración del encierro está condicionada a un posible desalojo forzoso por parte de la policía.
Se decide ocupar las oficinas del SAE el día 13 de marzo. Los compañeros pasan al interior y se mezclan entre el resto de personas. Al poco rato se colocan sus petos y uno de ellos lee ante los asistentes una octavilla con un resumen del manifiesto. En el exterior el resto de compañeros cuelgan las pancartas a lo largo del enrejado del recinto. Ese día, por la tarde, la oficina no abre al público, solo permanecen uno o dos vigilantes en el interior.
Para apoyar a los compañeros encerrados se ofrecen voluntarias y voluntarios, que por turnos se instalan cerca, en varias tiendas de campaña para pernoctar. Durante el resto del día se instala una mesa en la que se ofrece un manifiesto y hoja de firmas para cualquiera que quiera adherirse a las protestas. También se organiza una caja de resistencia que sirva de apoyo económico a los encerrados. El resto de días se convoca asambleas diarias a las 19:00 en la puerta del SAE.
Se procede a redactar, junto a los compañeros, resúmenes de la jornada en forma de comunicados, que se difunden más tarde y que reflejan el día a día y la experiencia del encierro. Durante todo el tiempo que duró el encierro entre todos se preparaban desayunos, comidas y cenas. Muchos vecinos apoyaron con alimentos y aportando dinero a la caja de resistencia o traían ropa limpia y se lavaba la usada.

HUELGA GENERAL DEL 29 MARZO DE 2012 Y PREPARACIÓN DEL FIN DEL ENCIERRO

El 29 de marzo de 2012 fue convocada la primera de las dos huelgas generales de ese año. Estaba respaldada por los sindicatos mayoritarios, pero también con el apoyo de un gran número de pequeños sindicatos, además de organizaciones y movimientos como el Movimiento 15-M y FACUA. El 14 de noviembre de ese mismo año se dio una segunda jornada de paro general bajo el nombre de huelga general europea.
El 27 de marzo se difunde por correo a los grupos y asambleas el comunicado nº7 de “Ocupasae”, que muestra el transcurso de la jornada del día anterior. Además, se adelanta que “los compañeros Manolo y Pepe, han decidido, junto al resto de la asamblea Cerro-Amate, abandonar la ocupación mañana, miércoles 28 de marzo, sobre las 19:30 horas de cara a incorporarse, más tarde, a los piquetes de huelga que hemos formado para el jueves 29 de marzo de 2012, día de huelga general.
Se prepara la desocupación del SAE. Ese día se organiza una manifestación en el barrio, cuyo punto de salida es el mismo SAE, y que luego se dirige hacia a la columna de la manifestación general.

LAS MARCHAS DE LA DIGNIDAD

El 22 de marzo de 2014, como resultado de las protestas al calor del 15M, decenas de miles de personas se manifiestan desde distintos puntos del país, convocándose marchas que terminarían en la Plaza de Atocha en Madrid. Según los medios se calculan un millón y medio de personas que secundan estas marchas.
A partir de esas protestas surgen, en muchas ciudades, las asambleas de las marchas con el fin de dar continuidad año tras año, más o menos coincidiendo con esa fecha. En Andalucía se crea la asamblea andaluza de las marchas de la dignidad. Esto son asambleas se celebran en diferentes ciudades cada año con anterioridad a las marchas, con el fin de organizar su preparación y discutir nuevas acciones.
Portavoces de las distintas asambleas de barrios y pueblos y también de organizaciones políticas y sindicales se dan cita en esas asambleas. La asamblea del Cerro llevaba regularmente propuestas de acción para movilizar a la población y que podían llevarse a cabo mediante la propaganda y a través de las asambleas.
La asamblea del 15M del Cerro decide que se puede preparar esa marcha contando con los barrios de su distrito, pero abierto a la participación general y organizar los viajes como una forma más de aprovechar las asambleas y para unir a la gente. La fórmula elegida consiste en celebrar una fiesta popular, con un contenido lúdico y a la vez formativo.
La fiesta se proponía como un lugar de encuentro, en un ambiente relajado, donde se podía aprovechar para conocer gente y confraternizar. Ese día, tras una pequeña asamblea, en la que todos los asistentes podían participar, se ultimaban los detalles previos al viaje a Madrid. Tras ello daba comienzo la fiesta popular. Se elegia un lugar, se organiza a la gente para la comida y la bebida, que se ofrecerá luego a precios populares. También se organiza un sorteo mediante la venta de papeletas numeradas. Se sortea muchas veces algo que cualquiera posee y no usa (una bicicleta, un patín…). También se explica, en las asambleas, que se puede aportar dinero para ayudar a quienes tienen dificultades económicas para sufragarse el viaje.
La fiesta, que suele coincidir un sábado o un domingo, está apoyada mediante cartelería y panfletos que se reparten por los barrios una semana antes. Se preparan cuadrantes para organizar los repartos entre los voluntarios y voluntarias, con las horas y las zonas, los barrios, las calles.
Se prepara una grabación para llevar la megafonía por coche con el anuncio de la fiesta para recaudar fondos para el viaje a Madrid, se recuerda la situación de crisis, que las marchas son la ocasión para salir a la calle a protestar junto al resto de gente.

EL DISTRITO CERRO-AMATE SE HACE BLANCO DE LAS PROTESTAS

En Octubre de 2014, la asamblea del Cerro organizaba una concentración en la sede del distrito, coincidiendo con un pleno municipal que se había de celebrar el 4 de noviembre. El objetivo era trasladar a los responsables políticos el hartazgo de la gente por años de pasividad, por la falta de apoyo a la población más necesitada y demandar soluciones ante la situación de emergencia social que el desempleo y la pobreza estaban causando en los barrios.

ASAMBLEA DE TRABAJADORAS Y TRABAJADORES EN LUCHA DE SEVILLA

Desde la comisión laboral de la asamblea del Cerro se propone que las asambleas sean un vehículo para tratar los problemas de la clase trabajadora. Pues ya desde que la asamblea empezó a funcionar en el distrito y en las distintas movilizaciones que se han llevado a cabo en los barrios, ha habido una constante: La falta de expectativas laborales en los barrios y del que depende el futuro de muchos jóvenes, además del paro que se cronifica para muchas familias, para responder y actuar ante esta situación había que partir del origen, que son las empresas y cuya patronal, con la ayuda de las leyes, explota laboralmente para aumentar sus beneficios al tiempo que empobrece al trabajador.
Para llevar adelante este acercamiento entre trabajadores se propuso la creación de una asamblea invitando a ella a los propios compañeros y conocidos de las distintas empresas, todas esas empresas en las que se conocía a alguien o trabajaba algún familiar. Una asamblea para discutir los problemas de cada empresa, entre todos los que formaban la asamblea.
La creación de esta asamblea de trabajadores en lucha es propuesta por el 15M Cerro Amate en el comité local de las marchas de la dignidad, en un acto el 4 de marzo de 2017 al que asisten empresas, colectivos y personas individuales, trabajadores y trabajadoras en lucha por sus reivindicaciones. Los objetivos de la asamblea se plasmaron en un manifiesto.
Uno de los objetivos era reunificar las luchas, allá donde un trabajador o colectivo de trabajadores tuviera un conflicto con la empresa, llevando el mayor número de apoyo posible y secundando las acciones que se decidieran. Secundar concentraciones o movilizaciones. De esta manera se imponía la solidaridad y mediante las asambleas se podía organizar el apoyo en la lucha contra los ataques de la patronal. Extender las luchas y llevar a la movilización general eran los objetivos primeros de esta asamblea.
Las asambleas se vinieron celebrando cada quince día. En mayo de 2018 dio muestras de agotamiento debido a la falta de combatividad, motivo por el que la asistencia fue disminuyendo progresivamente. Durante todo ese tiempo que funcionó, en esas asambleas se llevaron a cabo propuestas de acción para secundar diversas luchas Como el conflicto de los trabajadores en Procavi, las movilizaciones obreras en Cotronic o la de las camareras de piso de los hoteles, agrupadas bajo la plataforma Capise, por poner algunos ejemplos.
La asamblea del Cerro participó y apoyó muchas acciones de protesta mientras funcionó y fue un referente en esa época para el distrito, puede que también para otros muchos barrios menos combativos. Sus convocatorias y asambleas siguieron llevándose adelante, incluso cuando las elecciones facilitaron a Podemos el acceso a las instituciones.
Mucha gente, en esos primeros días, en ese momento, opinaba que con la llegada de Podemos al gobierno se había logrado llevar a la voz de los barrios al hemiciclo político. Que ahora la gente de los barrios podía ser escuchada, que Podemos podía servir para canalizar el malestar y proponer sus exigencias ante los demás políticos.
Progresivamente el movimiento, lleno de militantes de la izquierda que intentaban lanzar sus propuestas y ganar militantes, se fue desinflando manteniéndolo precisamente aquellos que luchaban en las filas de la izquierda. Después vinieron las mareas, las marchas, las corralas…, que hicieron que el movimiento pasara a representar a los sectores de trabajadores con recortes públicos y fundamentalmente en Madrid y que terminó en 2012 con el 22M con una gran manifestación en la capital.
El éxito electoral de Podemos, junto a la subida de IU, es el hartazgo ante la situación, y la esperanza de un cambio. Este cambio no podrá llegar sin las movilizaciones populares y sin que la clase trabajadora salga a la calle, en lucha por sus propias reivindicaciones. Por ello habrá que seguir impulsando la lucha obrera si no queremos que esta esperanza, estas ilusiones caigan en el desencanto y abra posibilidades para nuevos ataques de la derecha y los capitalistas.
10 años después, de aquel movimiento no queda nada. La situación de crisis permanente que se refleja en la falta de futuro de la población continúa, si cabe con peores perspectivas.
Los despidos, el paro, la precariedad laboral, los salarios de miseria y la falta de oportunidades para los jóvenes, sin olvidar los desahucios… Todo por lo que el gobierno de progreso dijo estar comprometido y nada de eso se ha arreglado. Solo ha salido mejorado el dinero en manos de empresarios y banqueros. La clase trabajadora solo ve pérdida de puestos de trabajo a su alrededor. Entonces, para la población todo lo que condujo a esa indignación en 2011 sigue muy presente e incluso peor.
Con la excusa de la pandemia, patronal y gobierno han orquestado una nueva reforma económica. Por un lado, para rescatar los capitales de los negocios capitalistas y ayudar a la patronal a salvar el salto que le permita modernizarse y afrontar el futuro.
La población trabajadora, en cambio, tendrá que soportar más recortes y sacrificios. La reforma de las pensiones obliga a seguir trabajando más allá de los 60 años, incluso los 70. Con altas retenciones en la jubilación para quienes se quieran jubilar antes de tiempo. El mercado laboral, ya de por sí lastrado por las reformas laborales, sufrirá nuevos cambios.
Un mercado laboral que deberá cumplir la agenda que exige el nuevo plan económico. Habrá nuevos ajustes en las relaciones laborales y se precarizará aún más el empleo y los contratos. A pesar de la introducción de nuevas tecnologías en las empresas, la explotación laboral seguirá aumentando.
Ello acompañado de un clima político cada vez más degradado, donde la corrupción sigue muy presente. Con una tendencia cada vez más acentuada a trasladar los problemas de la clase trabajadora al ámbito judicial y la inacción de las organizaciones sindicales.
La política está regresando hacia el modelo bipartidista con el Partido Popular y el Psoe, la novedad es la irrupción de la ultraderecha en el debate político y en la calle con su odio al extranjero y su visión retrógrada del orden social. Pero la maquinaria política en su conjunto juega con los recursos económicos y productivos a favor del capital. Donde los que salen perdiendo son los trabajadores y la banca y grandes empresas continúan ganando. Es el resultado de la gestión capitalista de una crisis que nos ha llevado a la catastrófica situación económica.
La falta de solución a los problemas de la clase trabajadora persiste y solo la propia clase trabajadora puede derribar este sistema mantenido para sostener los vicios y la podredumbre capitalista. Solo hay una salida y es la lucha organizada. El deterioro social y económico sigue avanzando a 10 años de esas movilizaciones, será cuestión de tiempo que, de nuevo, un estallido social salga a la calle a decir basta. Se esfumó el 15-M, pero la indignación sigue ahí. Y esta vez será la clase trabajadora la que tendrá que tomar la iniciativa y desarrollar su programa de lucha.