Se sigue con la negociación de clasificación profesional. Parece que todo el problema está en la nueva categoría de operadores universales que la empresa pretende hacer mezclando operadores auxiliares y técnicos, sin entrar en el debate de la colisión cada vez más evidente entre las funciones de ambas categorías. Resulta evidente que la empresa lo que busca con la medida no es otra cosa que el recorte de plantilla, pues el que todos hagamos de todo sólo supone -en definitiva- una destrucción de empleo en Telefónica porque no se abren bolsas de empleo estable donde haga falta, además de la otra destrucción de empleo que se está produciendo y que se va a producir en las contratas de la empresa.
