Ya sabemos cómo pagan algunos empresarios de renombre a sus empleados, ya sabemos cómo se financian algunos partidos políticos y cómo no tienen pudor ninguno en cobrar sobresueldos y a la vez exigirnos que nos apretemos el cinturón una y mil veces.
También sabemos que el estafador de Bankia, el banco que ha ejecutado hasta hoy más desahucios de España y llevado a la ruina a miles de ahorradores, es acogido por nuestra empresa como buen gestor… ¡Temblando deberíamos estar!