El proyecto de ley de Trump “ONE BIG BEAUTIFUL BILL” es UN GRAN HERMOSO REGALO a la clase capitalista. Pero también es UNA GRAN PREPARACIÓN TERRIBLE para la guerra. La gran ayuda del proyecto de ley es la reducción de impuestos de 3,8 billones de dólares, la mayor parte de la cual va al uno por ciento más rico de la población.
Esa transferencia de riqueza a los ya muy ricos se pagará con recortes que empobrecerán aún más a todas las comunidades de clase trabajadora.
Se va a recortar un billón de dólares de Medicaid y de los cupones de alimentos mediante cambios supuestamente «administrativos». Medidas similares de «eficiencia» recortarán más de 400.000 millones de dólares de la Seguridad Social y varios cientos de miles de millones más de Medicare.
El “ONE BIG BILL” de Trump, de 1.000 páginas, está repleto de recortes específicos que nunca llegan a los titulares. Pero perjudican a alguien. Si usted compra su propio seguro médico en el intercambio, su prima se disparará el próximo año. Si intentas obtener formación técnica en un colegio comunitario mientras trabajas, puede que pierdas tu beca y pagues más por un préstamo.
Por cierto, ¿te creíste la promesa de Trump de que tu Seguridad Social dejaría de tributar? Pues te ha “jodido”. Todavía se grava.
Si vives en zonas rurales donde los pocos hospitales se han mantenido gracias a los pagos de Medicaid, puede que veas cerrar el último. Si eres una mujer que depende de clínicas como Planned Parenthood (paternidad planeada) para sus necesidades médicas -incluidas las pruebas de detección del cáncer, las citologías y los anticonceptivos-, puede que veas cerrar tu clínica, privada del dinero federal que necesita.
Si es usted un inmigrante que trabaja todo el año y paga impuestos, descubrirá que no puede reclamar un crédito fiscal para sus hijos, ni siquiera si son ciudadanos estadounidenses. Si presentas una queja sobre seguridad en tu trabajo, es probable que te jubiles -o mueras- antes de que aparezca un inspector federal. Se recortan las inspecciones. Si sus hijos van a la escuela pública, su escuela recibirá menos dinero: se destinará a apoyar a las escuelas privadas.
Esto es sólo una muestra. Hay cientos de recortes más, arrancando dinero de programas sociales y servicios públicos para satisfacer el ansia de riqueza de la clase capitalista. Y eso no es lo peor. El “ONE BIG BEAUTIFUL BILL” añade cientos de miles de millones de dólares en gasto militar, por encima del billón de dólares ya asignado en la resolución presupuestaria aprobada en abril. El gran aumento es otra indicación de que el sistema capitalista nos está llevando por el camino hacia la guerra.
Por cierto, no miren a los demócratas con la esperanza de que si vuelven en 2026, acabarán con todo esto. ¿Olvidaste que los líderes demócratas del Senado dieron suficientes votos para aprobar la Resolución Presupuestaria de abril? ¿Olvidaste que los demócratas, cuando controlaban el gobierno, también aumentaron el gasto militar?
Durante más de un siglo, este gobierno, independientemente del partido que estuviera en el poder, ha llevado a cabo dos políticas principales, ambas a expensas de la población. Una ha sido mantener la riqueza fluyendo hacia las manos de la clase capitalista. La otra ha sido preparar la guerra que su sistema requiere.
Con toda su riqueza, esta nación capitalista no tiene hoy otra respuesta a los problemas que su propio sistema ha creado. El capitalismo, en sí mismo, muestra por qué necesita ser destrozado, desechado, reemplazado por un sistema que ponga las necesidades humanas en primer lugar.
Este sistema produjo en su momento un enorme florecimiento de la tecnología y la ciencia, que podían ponerse al servicio de la humanidad. Y el capitalismo también produjo «sus propios sepultureros», la clase obrera, la fuerza social que tiene el potencial de barrer el capitalismo.
Traducido de the-spark.net 1 junio 2025