Todos los días se nos bombardea sobre la clasificación profesional, sobre un nuevo modelo que nos arregle el futuro, etc. etc. Pero lo que de verdad tendría que hacer la empresa es contar de verdad con sus trabajadores, informarles bien sobre sus proyectos futuros, formarnos para que podamos realizar nuestras funciones adecuadamente y sobre todo no amenazarnos sobre que costamos mucho o de que no somos productivos.
Pase lo que pase con la clasificación profesional, primero debería consultarse a los trabajadores y segundo que no vengan dentro de dos meses cambiando porque ya no les sirva lo que hay, o sigan saltándose la normativa laboral.