Los redimensionamientos no son tales; lo único que se va a hacer es el ordeno y mando desde arriba hacia abajo. Le tienen dicho a los jefes que las secciones de reparto más conflictivas las asuman los que están en las más estabilizadas. Estos compañeros que están en estas secciones, desde hace tantos años, se tienen que ir a otras zonas de reparto que no son las suyas a resolver problemas.
Lo que van a hacer es desestructurarlo todo; los usuarios se quejaban de que el correo iba mal pero ahora, con esta forma de actuación, lo van a destruir totalmente. No nos extraña que con estas medidas los propios usuarios dejen de confiar en Correos y se vayan a otras empresas, con lo que eso supondría de pérdidas de puesto de trabajo.
¡No podemos consentirlo!