Ha sido noticia que el gobierno municipal de Sevilla del señor Zoido subvenciona con 150 millones de euros a las empresas públicas Tussam y Lipasam. Se torpedea cansinamente en los medios de comunicación, sobre todo los que controla el PP, con que ambas entidades son deficitarias, que hay que estar echando dinero encima y que si no fuera por las subvenciones no sobrevivirían.
Pues bien una cosa está clara, a este gobierno municipal hay que decirle que los servicios públicos son eso precisamente, que deben estar al servicio de todos y que deben ser costeados entre todos por igual, ¿o no es así? Tanto dinero traspasado a la banca y solo se quejan de lo que de verdad funciona; apañados estaríamos si nuestro transporte o limpieza dependiera de la privada, aunque nuestro alcalde claro está ya no se quejaría, ni que el presupuesto fuese suyo, ¡oiga, que es de todos los trabajadores y trabajadoras!