Hace escasos días nos hemos enterado de que la Fiscalía del Tribunal Supremo ha archivado las tres diligencias de investigación que se habían abierto contra el rey emérito Juan Carlos I. Tras más de dos años en los que se iban a investigar sus actividades económicas por si había indicios de delito esta Fiscalía da carpetazo. ¡Indignante!
Por lo visto el que Juan Carlos haya hecho varias regularizaciones fiscales, a prisa y corriendo y ya estando imputado, y que se le siga reconociendo figura inviolable, todo ello ha bastado para que pueda irse de rositas.
Recordemos que hace dos años la misma Fiscalía había abierto investigaciones al emérito por supuesto cobro de comisiones del AVE a la Meca a empresas españolas. Otros asuntos eran el uso de tarjetas de crédito opacas y averiguar la existencia de una cuenta con 10 millones de euros a su nombre en el paraíso fiscal de la isla de Jersey.
Pus la Fiscalía aquí en España ha decidido que no hay nada que investigar, a pesar de haber claros indicios penales y ha pasado del tema olímpicamente, declarando además que esos delitos ya han prescrito. Esta es la forma de impartir justicia a la que nos tiene acostumbrados el TS en este país. Las redes echan humo por la sorpresa y el malestar que ha causado la noticia. Una frase resume lo sucedido así “si eres Rey puedes delinquir que no pasa nada”.