Saltar al contenido

NUEVOS RECORTES, NUEVO ROBO A LOS TRABAJADORES ¡BASTA YA! HAY QUE PREPARAR LA LUCHA OBRERA ES NUESTRA ÚNICA GARANTÍA

     La Dirección de la empresa ha comunicado a los sindicatos los nuevos recortes salariales que el decreto de Rajoy impone. Significa para todos los trabajadores y empleados públicos, sean de la Administración o de la empresa pública, la supresión de la paga extra de navidad o la catorceava parte de nuestro salario anual, en nuestro caso, entre otras medidas no menos importantes como la reducción al 50% de la ILT, o la subida del IVA. Estas medidas, junto al aumento del horario de trabajo a 37,30 horas semanales, son una vuelta de tuerca más a las condiciones de vida de los trabajadores y vienen a empeorar nuestros salarios.

Ahora, ¿cuánto quieren robarnos más?

     Cuando nos dicen que sólo vamos a perder 400 € más anuales, es mentira. La Dirección quiere quitarnos 400 € más, que hay que sumar a los 1300 que ya nos han quitado. Pero habría que sumar la ½ hora diaria más (hasta las 37,30 h.), si lo multiplicamos por 224 días efectivos de trabajo anual son 112 horas  que multiplicadas por 17euros/hora, son 1904 €. Más los DCL, que el gerente quiere que lo cojamos en descanso, con lo cual dejaríamos de percibir en metálico unos 833 €. Total, 4.437€, y si le sumamos el 7% de pérdida de poder adquisitivo por los años de congelación salarial, y el IRPF, la suma es mayor. Son 4450 € aproximadamente el robo que la empresa y su gobierno nos hacen, y ¿para qué?, ¿para crear empleo?, ¿para eliminar la deuda? Mentira, este dinero robado a los 1400 trabajadores de Tussam, 6,2 millones de euros en total, va para pagar a la banca ladrona que se enriquece a costa de todos los trabajadores. Este ataque va directo a todos los sectores de trabajadores de nuestra empresa, desde los conductores, al personal de talleres, administrativos etc. Y lo que nos ocurre a nosotros, le ocurre a toda la clase trabajadora.

¿Por qué hay que preparar la lucha ya, y en asambleas?

     Porque los ataques van a seguir. Ahora se espera un nuevo “rescate” de cientos de miles de millones que hay que sumar a los miles que ya le han dado a los bancos y que pagamos con los recortes salariales y de los servicios públicos. Si alguien cree que cediendo a la patronal y aguantándose, podemos capear el temporal, se equivoca y se vuelve a equivocar. Ya hay pruebas para quitarse la venda de los ojos y comprender que mientras más tiempo nos callemos y aceptemos sin rechistar sus medidas antiobreras, más nos van a machacar. Si alguien cree que se puede “negociar” los recortes y se cree la “buena fe” del gerente, ya es hora que vea la realidad. Cualquier negociación en estas circunstancias es una trampa para perder el tiempo nosotros y ganarlo ellos. Y la mejor forma de participar, controlar y elegir a los delegados, decidir democráticamente y movilizarnos es en asamblea. Así nadie decidirá por nosotros, todos decidiremos.

¿Por qué no puede haber garantías en la negociación de las medidas en la actual situación de crisis del capitalismo?

     Porque, al igual que el famoso “plan de viabilidad” para salvar Tussam, no es un problema de buena “fe”, de negociación democrática o de empresa. En realidad, estamos asistiendo a la quiebra de un sistema económico incapaz de resolver los problemas básicos de la población y que nos lleva sin freno a la catástrofe social y humana para millones de personas. Un sistema enfermo que necesita, para mantenerse vivo, seguir robando del trabajo y los recursos públicos. Porque, en definitiva, el capitalismo es la búsqueda de beneficios y no la búsqueda de la satisfacción de las necesidades humanas. Por eso seguir alimentando con recortes el monstruo capitalista es mantenerlo vivo y engordarlo para ir de catástrofe social en catástrofe social, hacia el abismo. Recordemos la crisis de 1929.

Y porque el capitalismo es una organización económica de la sociedad que funciona por el beneficio que sale de nuestros salarios.

     Todo intento de bajar los salarios de los trabajadores a cambio de “seguridad” o aceptarlo por la crisis económica es beneficio para los capitalistas. El dinero, miles de millones, circula entre los bancos, las grandes empresas y las grandes administraciones, sin problemas. Presta el Banco Central Europeo, a menos del 1% miles de millones, a los bancos, que después compran deuda pública con intereses usureros del 6, 7%, o más. Es el negocio del robo a todos los trabajadores. Mantener sin luchar y movilizar a los trabajadores para negociar un acuerdo es como si confiaras en un “yonki” y le dieras un “préstamo” firmando un recibo garantizado.

     Hay que repetir que no hay más solución que organizar la lucha. Que decir NO a los recortes. Y no podemos pensar que nuestra empresa puede “salvarse” sola. Ha llegado la hora de coger el toro por los cuernos. Hay que preparar la lucha todos los trabajadores de esta empresa y pensando en el resto, para buscar la unidad. Los empleados municipales y los trabajadores somos una fuerza inmensa.