¡María y Jesús, su hijo ilegitimo, deben removerse en su tumba!
Las misas del 15 de agosto han sido la ocasión para la iglesia católica francesa para lanzar un nuevo mensaje de paz y amor: esta vez se trataba de manifestar su oposición total al matrimonio y a la adopción por parejas homosexuales.
Los admiradores de María quieren amar al prójimo, incluso si es homosexual, a condición de que no pretenda sin embargo ser un individuo como los demás… ¡María la hija-madre y Jesús, su hijo ilegitimo, deben removerse en su tumba!
Traducción de F.P.
Tomado de Kaos en la Red