Saltar al contenido

La Europa capitalista condena a miles de inmigrantes

Llega el buen tiempo y con él las pateras, navíos o cualquier otro medio mediante los cuales miles de inmigrantes intentan llegar a Europa huyendo de la miseria y el hambre, la explotación social, las guerras y la violencia.

Los gobiernos de la Unión Europea intentan tapar su responsabilidad en lo que constituye un verdadero genocidio contra los más pobres. El hundimiento de barcos en el Mediterráneo con inmigrantes, los miles de muertos en lo que va de año, no nos debe dejar indiferente, como tampoco las vallas de Ceuta y Melilla, muro de la vergüenza para reprimir a los más pobres.

Desde la UE la solución a los problemas de la inmigración es… ¡la destrucción de los barcos que los transportan, repartirse cuotas de inmigrantes por países o militarizar las fronteras para que no pasen! En definitiva, aislar los países capitalistas desarrollados de los países pobres.

No hay solución al hambre y la miseria o las guerras cuando estas son provocadas directa o indirectamente por los mismos países que después se llenan la boca hablando de derechos humanos. Es pura hipocresía cuando, por ejemplo, la guerra de Libia -organizada por los grandes países capitalistas para controlar países y petróleo- está provocando cientos de víctimas inocentes. O cuando se sostienen países con dictaduras, como Marruecos, donde prima la explotación y la vida no vale casi nada. Y si bajamos en el continente no veremos más que un puñado de multinacionales esquilmando los países de su riqueza, sea minerales o agricultura, sea con el negocio del agua, la luz o las telecomunicaciones.

El capitalismo es un sistema que ya ha terminado su papel histórico. Lo único que trae ya es explotación y guerras, miseria y hambre al mundo para que un puñado de banqueros y grandes empresarios se enriquezcan a costa del trabajo de cientos de millones de trabajadores.